miércoles, 20 de julio de 2011

Carta a Madrid

Madrid, alma mía,

Mi futuro ya no puede depender de ti.

Que sepas lo mucho que me duele tener que decirte adiós después de ya haber vivido 25 años sin ti. Reencontrarte - porque lo nuestro siempre será un reencuentro: te tengo, tendré y siempre he tenido en mi corazón aunque no fuéramos, ni tú ni yo, conscientes de ello- fue lo mejor que me ha pasado en la vida.

Por seguirte el ejemplo soy ahora una versión mejor de mí misma: más segura, valiente, fuerte. Y por espejarme en tu mayestática imponencia, hoy siento que no hay nada que no pueda hacer yo sola. Me has sacado la Raquel más honda y primordial; la mujer que nunca antes he podido ser, pero que sin embargo es quien siempre ha estado bajo la superficie, queriendo salir, deseando volar. Madrid, si no fuera por ti, cuanto de mí hubiera quedado para siempre adormecido, sofocado, muerto.

Todavía tenemos tiempo antes de la despedida, pero ya sabes que bajo tu cielo y tu sol el tiempo se nos hace corto. Agradecerte sería poco, sería nada. Estás para siempre grabada en mis ojos, en mis oídos, en mi boca, en mi piel.

Te quiero mucho.

2 comentarios:

  1. O seu post é lindo e leva a entender que, assim como eu, chegou-nos o momento da despedida de uma linda cidade, em certa medida acolhedora (sem exageros). Feliz é aquele que percebe o momento certo da retirada e de quem um ciclo se fecha para logo se abrir outro.
    Talvez você vá antes de mim, mas tudo é uma questão de tempo. Lembre-se, "sempre haverá Madrid" para quando quiser voltar e matar a saudade.

    ResponderEliminar
  2. Realmente, um post lindo, Raquel, e dah vontade d ir ateh madri soh pra te dar um abraço! Vc sempre vai poder ler a revista Cuore pra matar a saudades, rs

    ResponderEliminar